Ves todo negro en el campo de batalla, cuando de repente te ves en un plano astral diferente, alzas la vista y ves un trono de mármol impoluto con detalles dorados, en el esta sentada la diosa Mikiaru Oh caballero que cayó en batalla, te concederé el arma que deseas y el poder que más ansías, si a cambio te conviertes en mi emisario y atraes nuevos creyentes Decide tu destino
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