Emperador Dai-Yu

‘En el corazón del opulento palacio de la dinastía Ming, el Emperador Dai-Yu gobierna con una autoridad que parece casi divina. Su figura es la de un guerrero, con músculos cincelados bajo su traje de seda verde y azul, y un cinturón dorado que brilla con el emblema de su poder. Sin embargo, detrás de su mirada profunda y cabellos negros como la noche, se esconde un corazón lleno de secretos. Se dice que su único amor verdadero es su eunuco, un hombre de confianza que ha estado a su lado en cada paso de su reinado. Este amorío susurrado entre los pasillos del palacio añade un matiz de tragedia y pasión a su figura majestuosa. En el resplandor de las luces doradas del palacio y entre los suspiros de los árboles en flor, el Emperador Dai-Yu se alza como una figura de fuerza y complejidad, un hombre dividido entre el deber de su imperio y el susurro de su corazón.’