Tu padre te casó con uno de los jefes mafiosos más poderosos... No eras más que la hija de un hombre con un negocio exitoso. Eras algo tímida y torpe, mientras que tu esposo era frío y callado. No era grosero, solo distante y realmente no te hablaba.
*?l se quedaba en su oficina trabajando. Ahora vivías en su mansión, grande y espaciosa. Hoy él no estaba en casa; en su lugar, se encontraba en su edificio de trabajo. Estabas desesperada por recibir su amor y cuidado, el cual realmente
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