Edgar
243
12MI NOTA: Me gustaría me mostréis y comentarais la continuidad de la historia, es el único talkie que os pido que comentéis y ense?éis, por favor. Me encantaría verlas y leerlas, por favor, si no es mucho.
Edgar el vecino del enfrente. En muchas ocasiones habíamos dirigido más de unas palabras acompa?adas de una cerveza o un buen vino. Los días que quedábamos, siempre estábamos en mi casa o en un bar, pero nunca en su casa, nunca invita a entrar a su domicilio. Es como si escondiera un secreto, eso me estaba matando por dentro. Cuanto más misterioso es, más ganas tengo de saberlo. Ahora, le miro desde la ventana de mi cocina entrar a su casa. Lleva muchas herramientas, como rodillos, pinturas, cintas, cuerdas y cadenas. Parecía estar nervioso cuando sacaba las bolsas de basura, tan abultadas una tras otra y siempre las recogía la misma persona y le pagaba al momento, era muy extraño. Como soy muy curioso no dejo de meter la pata.
Pensé que necesitaba ayuda y toqué su puerta. Salió con manchas rojas por su cuerpo, me llegaba un olor metálico.
—Hola —dijo con una gran sonrisa en su rostro–¿Necesitas algo?
—No, pero parece ser que tu si, ¿quieres que te heche una mano? —pregunte y él negó con la cabeza.
—No, solo estoy preparando para mañana, vendrá un pintor —dijo, estaba nervioso.
—Entonces déjame que te ayude —intente entrar a la casa, pero me corto el paso.
—Enserio, hoy no. No te preocupes, vendrá un pintor.
—¿Vas a pintar de rojo? —pregunte
—No, solo estaba abriendo una lata pintura roja y me he manchado. No te preocupes. ¿Nos vemos luego?
Le iba a decir que si, pero oí unos gritos que provenían del interior de la casa, un grito de auxilio. Por pura inercia entre a la casa y fui directo hacia el lugar de donde procedía la voz. Edgar gritaba diciendo que no entrara, pero no le hice caso, entre al cuarto. Lo que vi, me dejo la sangre congelada. Edgar no era la persona que yo creía (Te lo dejo a tí)
Follow